miércoles, 11 de enero de 2012

Sintiendo de una forma paralizante.


Bajo las escaleras con el silencio de un felino y en el ultimo escalón se quedaron sus pies clavados. Miro al salón y pudo escuchar que ella estaba despierta gracias a uno de sus suspiros. Volvió a moverse igual que antes, sin ruido alguno y cuando estaba en la puerta su cuerpo quedo paralizado, sus ojos abiertos al máximo, su mirada dirigida a ella y sus labios apretados impedían el saludo de buenos días.
Ella, su presencia, su esencia tan especial, su forma de envolverlo todo en un estado diferente, así era ella en aquel salón aquella mañana.
Pudo mover sus labios y musitar la palabra "vida..." con muy poca motivación pero con bastante sinceridad como para que ella se diera cuenta y volvió a moverse buscando su taza de leche.
Una vez taza, en mano se puso a mirar por la ventana, mientras ella rondaba por su alrededor rozandole todas las partes de su cuerpo lo cual influía en su pose pues volvía a paralizarse. Sus ojos parecían a ver olvidado el pedir un parpadeo, su boca entreabierta dejaba que fuera tomando la leche lentamente, saboreandola como si por ultima vez la fuera a tomar.
De pronto todo cambio pues su paralización se fue en un segundo y su mente quedo en blanco durante unos minutos, hasta que vio el fallo. Ella se esfumo del salón y sin su presencia nada volvía a ser tan perfecto como hacia unos minutos.
Dejo la taza encima de la mesa de cristal y volvió al tocadiscos colocando de nuevo la aguja. El vinilo era el causante de la presencia de ella, porque sin ella nada es nada, ni un simple desayuno, ni una simple mañana.

2 comentarios:

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  2. No está nada mal... Pero tienes que escribir más!!! Cuiiidate Elvi :)

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